¿Estás pensando en si estás embrujado? Entonces sigue leyendo, porque hoy te hablaré de los trucos que querrás conseguir para poder saber si estás en un momento en el que te hará falta corroborar que no te han hecho ningún mal de ojo.
Hay algo que no falla: coloca un dedo (el corazón) en un platillo pequeño lleno con un par de cucharas de aceite, tras empaparlo bien, deja caer un par de gotitas en un vaso de agua. Si éstas se dispersan y se quedan en mismo tamaño que al dejarlas caer, no tendrás nada.
El problema será cuando notes que se van agrandando y se van escurriendo al fondo del vaso, ahí sí significará que tienes magia de la mala contigo. La solución será ir a la vidente de confianza para que pueda eliminarte el mal de ojo o la brujería que existe sobre ti. Será la única manera de poder hacer que todo se recoloque de una manera totalmente saludable.
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